1/16/2006

Mágica palabra, mézclate en mi sangre como la cerveza en mi estómago. Revienta en mis venas como la burbuja dorada del lúpulo fermentado. Riega de etanol mi cerebro y lava mis fallos. Maldito recuerdo, tienta al olvido constantemente en la frágil memoria. En el continuo paso del tiempo.

Impertérrito avanza, como la pesadilla que te desconcierta en la noche, sin temor de nada. Límpiame de esta absurdez. Me siento como Turgalas intentando dar explicaciones, absurdo; como una ameba procurando buscar un propósito a su conducta.

Luna blanca, que despuntas marfilada entre las nubes de la oscura garganta nocturna, vuélveme loco por completo. No me dejes a medio camino, intenta que me posea la rabia, que te imagine mujer y te desgarre la ropa.

Araña mi carne sangrando mi alma. Tristeza absoluta, mágica palabra.

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