10/03/2007

Es no estar pendiente del teléfono porque sabes que volverás a su voz. Es no necesitar su número porque tienes la certeza de que tus ojos se llenarán de nuevo con su mirada. Es no tener miedo a pensar constantemente en ella preguntándote si será mutuo. Es tener guardada en la mochila su última carta para sentir que va contigo.

Es comprender que te comprende como tú a ella. Es compartir inquietudes. Es observar embelesado el vuelo de sus secretos sin querer cortarles las alas. Es mirar el cielo de sus pupilas al caer en el silencio sin querer convertirte en su sol. Es que se convierta, sin que te des cuenta, en la luna del tuyo.

Es darse cuenta de que cambias. Es cambiar sin apenas darte cuenta. Es sonreír a las penas para alegrar a la tristeza. Es saber que te saben. Saber que te esperan. Esperar que te encuentre en cualquier momento. Es en cualquier momento esperar encontrarla.

Es estudiar su caligrafía. Es imaginar que eres el contenido de sus palabras. Es contener las palabras en el corazón y sostenerlas en la mano abierta con la palma hacia arriba para que cualquiera pueda verlas.

Es desear a cualquiera lo que sientes. No sé cómo se llama, pero sé que eso es.

1 comentario:

Anónimo dijo...

acabarás sabiendo lo que es :)

(-off topic- te voy a mandar un correo ahora, asi que si eso cuando leas esto entra en hotmail plis ^^)